El Impacto Transformador de la IA en la Ciberseguridad
En el ámbito laboral, la adopción de la inteligencia artificial (IA) por parte de las empresas se considera inevitable. Un reciente estudio de la reconocida organización sin fines de lucro en ciberseguridad, ISC2, revela cómo la IA está influyendo significativamente en los profesionales del sector y subraya la necesidad urgente de que las empresas mejoren su preparación ante estos cambios. Según el estudio, un 88% de los encuestados considera que la IA tiene un impacto significativo en su trabajo, ya sea en el presente o en el futuro cercano, y un 35% ya ha experimentado los efectos transformadores de la IA.
La Necesidad de Preparación ante los Riesgos Cibernéticos
Mientras la IA promete combatir las amenazas cibernéticas y aumentar la eficacia de la seguridad, ISC2 también señala la necesidad urgente de que las empresas estén mejor preparadas para mitigar los riesgos cibernéticos y proteger su infraestructura.
Colaboración para una Adopción Segura de la IA
Con el aumento en el número de ciberataques, incluyendo las amenazas de ransomware a niveles récord, existe un temor considerable dentro del panorama empresarial de que la IA represente una amenaza real para la supervivencia de los negocios. Muchas organizaciones encuestadas el año pasado expresaron su preocupación por cómo las amenazas digitales podrían forzar el cese de sus operaciones en el próximo año.
El sector de la ciberseguridad aún está evaluando las implicaciones completas de la IA. Si la tecnología se integra con éxito en las herramientas de seguridad hacia adelante, además de que las empresas se vuelvan más conscientes de la ciberseguridad, la IA podría tener un gran valor empresarial en el futuro.
A pesar de que el 82% de los encuestados expresó optimismo sobre cómo la IA mejorará la eficiencia del trabajo y liberará tiempo para tareas de mayor valor, el 75% está preocupado de que la tecnología sea utilizada para ciberataques u otras actividades maliciosas.
ISC2 también encuentra que existe una creciente disparidad entre la experiencia en IA y el nivel de preparación para navegar estas preocupaciones, citando deepfakes, desinformación y la ingeniería social como las tres principales preocupaciones actuales para los profesionales de la ciberseguridad.
Gen, la empresa matriz de Norton, ya ha sugerido que los ataques de ingeniería social, en particular, se convertirán en una amenaza mucho más pronunciada en 2024, desencadenando aún más debates sobre la gobernanza de la IA.
Sin embargo, a pesar de tales preocupaciones, solo el 27% de los encuestados por ISC2 dijo que su organización tiene políticas en lugar para utilizar la IA de manera segura y ética. De hecho, el 41% informó que actualmente tienen poca o ninguna experiencia en asegurar la tecnología de IA y aprendizaje automático, lo que sugiere graves consecuencias si algo saliera mal. Además, solo el 27% de los participantes indicó que su organización cuenta con políticas formales para el uso seguro y ético de la IA, mientras que un 39% declaró que su organización está en proceso de discutir una política formal.
Oportunidades para Profesionales de la Ciberseguridad
La conclusión es que las empresas se beneficiarían enormemente al invertir en el valor de la IA, ya sea mediante la actualización digital de sus fuerzas laborales o promoviendo una mayor transparencia en cuanto a la seguridad de la IA. «Los profesionales de la ciberseguridad anticipan tanto las oportunidades como los desafíos que presenta la IA y están preocupados de que sus organizaciones carezcan de la experiencia y la conciencia necesarias para introducir la IA en sus operaciones de manera segura,» afirma Clar Rosso, CEO de ISC2.
«Esto crea una tremenda oportunidad para que los profesionales de la ciberseguridad tomen la iniciativa, aplicando su experiencia en tecnología segura y asegurando su uso seguro y ético. De hecho, ISC2 ha desarrollado talleres de IA para fomentar la colaboración dirigida por expertos que la fuerza laboral en ciberseguridad necesita para abordar este desafío,» continúa.